¿Qué es la pintura al óleo?
El óleo es una
técnica pictórica en la que los pigmentos se mezclan con un aglutinante compuesto
por aceites. Esta base aceitosa convierte a la pintura al óleo en una de las
preferidas por los artistas para trabajar, pues los aceites le aportan fluidez
a la pintura. Es una masa de pintura muy espesa y dura, pero
al mismo tiempo es fácil trabajar con ella por cómo se desliza sobre el
soporte.
La pintura al óleo permite crear una amplia paleta de color partiendo de
la combinación de los colores base con un resultado de gran calidad. El aceite
también permite que la pintura tarde mucho en secar, por tanto los cuadros no
necesitan realizarse en un periodo concreto, si no que se puede dilatar su
tiempo de realización.
Otra de las grandes virtudes de la pintura al óleo es que su acabado es
brillante, de color muy vivo y se conserva en tal estado durante siglos,
literalmente. Con unos controles mínimos de conservación, limpieza y
restauración la pintura queda perfecta, pase el tiempo que pase.
Como pintar al óleo
1. Uso de capas. La pintura oleo
permite cubrir una sección ya pintada con otra capa de color.
2. Intensificación de
color. Diluir la pintura en varias escalas tonales servirá para definir la
forma de los objetos y crear volumen de manera sencilla.
3. Bloqueo de color. Seguir los
contornos de un objeto con pintura diluida para delimitar los bordes utilizando
los mismos tonos que se han empleado dentro del elemento pintado.
4. Piel blanca. Aunque no haya
dos personas con el mismo color de piel, una cosa que te ayudará a pintar casi
todo tipo de pieles (entendidas como «blancas») es utilizar una base en tonos
anaranjados y blanco. Para las zonas con menos incisión de la luz puedes
aportar colores fríos como azul o violáceo.
5. Sensación
de transparencia. Para conseguirla se debe dibujar el objeto transparente y después
aplicar unas pinceladas de alguna pintura más opaca por encima del objeto.
6. Sensación de metal. Utiliza el
contraste entre el color negro y el blanco para crear el reflejo y ayúdate de
la pintura blanca diluida para crear la sensación de brillo. Por último unas
pinceladas sutiles de blanco te ayudarán a hacer pequeños destellos.
7. Volumen con blanco. Para dar
sensación tridimensional a un objeto de color liso puedes aplicar unas finas
pinceladas de color blanco por encima.
8. Crear fondos rápidos. Con aplicar unas
pequeñas pinceladas de pintura diluida en espacios separados es suficiente
para, después con unos brochazos extenderla y crear un fondo uniforme y rápido.
9. Suma carboncillo. A modo de
«técnica mixta» puedes ayudarte de un carboncillo para reforzar la sombra
propia y la proyectada de algunos objetos.
10. Manchas de
pinceladas. Puedes hacerte servir de forma de la mancha de pintura como medio
expresivo. Con ello podrás diferenciar planos, objetos, texturas etcétera en
función del tipo de pincelada que dejes sobre tus lienzos para óleo. Puede ser larga, corta, a puntos…
11. Puntillismo. Como en el
impresionismo, puedes emplear ésta técnica para tus obras. Con pequeñas manchas
de pintura debes cubrir todo el dibujo atendiendo a que cada punto represente
el tono exacto que encaja en esa parte del cuadro